Bruno Fernandes ha sido el jugador más importante del partido de Portugal en frente de Ghana. El mediapunta ha asistido a João Félix y Rafael Leao en dos de los 3 tantos del equipo (3-2), marcados todos en la segunda una parte del encuentro. El futbolista que le cambió la cara al Manchester United con su llegada, echándose al equipo a la espalda y metiéndolo en Champions tras una travesía en el desierto, ha empezado el Mundial haciendo lo propio con Portugal, probando la clase que acumula.
Sobre estrellas como Bernardo Silva, Cancelo, João Félix o Cristiano Ronaldo ha brillado la figura del jugador natural de Maia. Ha tenido el criterio preciso en un partido que en muchos tramos era un correcalles, ha dominado el centro del campo y ha tratado de llevar el tempo del juego.
A la selección portuguesa le ha costado abrir la lata. En el primer tiempo ha estado muy cerca en dos jugadas polémicas, un gol de Cristiano Ronaldo cancelado por una leve falta anterior y después un posible penalti no pitado sobre João Félix.
Por si esto fuera poco, cuando lo ha logrado con un gol histórico de penalti en su quinto Mundial anotando, Portugal recibió el empate inmediatamente, y las dudas aumentaban en una primera jornada con múltiples sorpresas.
En ese contexto, donde otros se achican, ha emergido la figura de un futbolista sublime. En dos minutos, ha mostrado su repertorio y ha dejado el partido sentenciado, o eso parecía. Primero ha mostrado su capacidad para meditar y ejecutar rápido: transición veloz del equipo portugués, se vira, deja correr el balón y, de primeras, pone un balón entre líneas, medido para la carrera de João Félix, al que deja solo frente al portero con la cooperación de Baba, al que se le cuela el esférico entre las piernas.
Después ha exhibido su capacidad para adaptar. Ha conducido, ha aguardado y, cuando para el ojo inexperto parecía demasiado tarde, era el instante justo para habilitar a Rafael Leao y que anotara el gol. El VAR ha ratificado su capacidad para medir el espacio-tiempo preciso para dar el pase.
En el aspecto puramente estadístico, Bruno Fernandes ha completado 48 pases de 51 intentados (94,1 por ciento ) y más de la mitad de ellos (25) han sido en el último tercio de campo. Asimismo ha sido el que más ocasiones ha generado en el partido con 3 y el que más centro ha intentado de su equipo con 5 y segundo del encuentro.
Además de esto, ha tenido 66 intervenciones, un regate, un duelo aéreo ganado y ha provocado 4 faltas para su equipo. Los 3 pases que ha fallado fueron en el último tercio, ninguna pérdida comprometida en campo propio.
Sus dos asistencias han sido trascendentales para dar los primeros 3 puntos a Portugal y su peso en el encuentro merecía ser señalado como de los mejores jugadores de la primera jornada. El MVP del partido ha sido para Cristiano Ronaldo, mas más por marketing que por puro futbol.
A la selección portuguesa le ha costado abrir la lata. En el primer tiempo ha estado muy cerca en dos jugadas polémicas, un gol de Cristiano Ronaldo cancelado por una leve falta anterior y después un posible penalti no pitado sobre João Félix.
Por si esto fuera poco, cuando lo ha logrado con un gol histórico de penalti en su quinto Mundial anotando, Portugal recibió el empate inmediatamente, y las dudas aumentaban en una primera jornada con múltiples sorpresas.
En ese contexto, donde otros se achican, ha emergido la figura de un futbolista sublime. En dos minutos, ha mostrado su repertorio y ha dejado el partido sentenciado, o eso parecía. Primero ha mostrado su capacidad para meditar y ejecutar rápido: transición veloz del equipo portugués, se vira, deja correr el balón y, de primeras, pone un balón entre líneas, medido para la carrera de João Félix, al que deja solo frente al portero con la cooperación de Baba, al que se le cuela el esférico entre las piernas.
Después ha exhibido su capacidad para adaptar. Ha conducido, ha aguardado y, cuando para el ojo inexperto parecía demasiado tarde, era el instante justo para habilitar a Rafael Leao y que anotara el gol. El VAR ha ratificado su capacidad para medir el espacio-tiempo preciso para dar el pase.
En el aspecto puramente estadístico, Bruno Fernandes ha completado 48 pases de 51 intentados (94,1 por ciento ) y más de la mitad de ellos (25) han sido en el último tercio de campo. Asimismo ha sido el que más ocasiones ha generado en el partido con 3 y el que más centro ha intentado de su equipo con 5 y segundo del encuentro.
Además de esto, ha tenido 66 intervenciones, un regate, un duelo aéreo ganado y ha provocado 4 faltas para su equipo. Los 3 pases que ha fallado fueron en el último tercio, ninguna pérdida comprometida en campo propio.
Sus dos asistencias han sido trascendentales para dar los primeros 3 puntos a Portugal y su peso en el encuentro merecía ser señalado como de los mejores jugadores de la primera jornada. El MVP del partido ha sido para Cristiano Ronaldo, mas más por marketing que por puro futbol.