Tchouameni salva al Madrid en Son Moix (0-1) | VIDEO-RESUMEN + GOLES

Un solitario tanto de Tchouameni, en un partido con muchas ocasiones en la segunda parte, decidió un duelo trampa para los de Ancelotti, que salen de Mallorca con 3 puntos y la Liga amarrada. Carletto rotó en la batalla del próximo miércoles en Champions y la apuesta le salió bien al italiano con un deslumbrante Modric, el mejor Tchouameni del año, si bien no va a estar en el Etihad por tarjetas, y un Brahim que desaprovechó hasta un par de ocasiones claras. A los de Aguirre no les llegó con el compromiso y la voluntad, si bien Lunin debió sacar un par de manos salvadoras.

Brincó el Madrid al césped de Son Moix con la cabeza en Manchester, como no podía ser de otra manera. Lo hizo con Modric, Joselu, Brahim, Nacho, Lucas y un Tchounameni que no va a estar en el Etihad por tarjetas. En el once no estaban Vinicius, Rodrygo, Kroos, Carvajal ni Camavinga. Quien sí aparecía era Bellingham, más necesitado de confianza que de minutos, algo que Ancelotti trató de darle cara la final del miércoles. Javier Aguirre asimismo salía con caras nuevas por el cansancio amontonado tras la final de la Cartuja. En portería retornaba Rajkovic, apareciencido en defensa Maffeo en el carril derecho y Nastasic en el eje de la zaga. En la medular entraban Morlanes y Antonio Sánchez, y arriba Muriqi se quedaba solo.

El partido fue cerrado en su primera parte. Se jugaban mucho los dos, en especial un Mallorca que precisaba sumar para escapar de la quema del descenso. Así que los de Aguirre se preocuparon más de perseguir a los blancos por el campo y de que se no diesen la vuelta para enfrentar a sus defensores. Por lo que no hubo muchas ocasiones en una primera parte en la que fue nueva fue la ovación del estadio a Abdón Prats en el minuto 9 con 5 mil máscaras del delantero repartidas en la grada.

Había advertido Ancelotti que el Madrid debía igualar el compromiso colectivo de los bermellones y sumarle a eso su talento. Y en la primera parte el compromiso local superó a la actitud blanca, aparte de cancelar el desequilibrio de los visitantes. En verdad, la ocasión más clara, hasta la media hora, fue un testarazo de Raíllo en un córner que Lunin debió sacar al lado de la cepa del palo. El Mallorca llevaba al partido al escenario que más le interesaba frente a un Madrid perezoso. Respondió Bellingham con un zapatazo al travesaño que despertó a los blancos, mas Joselu no recibió ni un centro de sus compañeros en el primer tiempo, lo que dejó a los centrales locales pasar una primera mitad plácida. Con Brahim en la izquierda y Valverde y Lucas en la derecha, Jude estaba más suelto al tener a Joselu atrayendo la atención de los zagueros mallorquinistas. Mas al reposo se llegó con un empate espeso y hastiado.

Salió el Madrid con dos marchas en ataque del vestuario, algo que se tradujo a veces. Primero un disparo de Bellingham que Rajkovic debió abortar y en el minuto 48 un latigazo de Tchouameni desde 30 metros que rozó en un contrincante para caer en la red bermellona y adelantar a los de Ancelotti. Ahora la pelota estaba en el tejado de Aguirre, al que ya no le calidad con desactivar a los blancos. Precisaba plantear el Mallorca, que echaba mano de un futbol directo que era fácil de proteger por la parte de los Madridistas, que tuvieron ocasión de sellar el triunfo con un disparo de Brahim que Rajkovic detuvo. El portero serbio salvó a los locales en otra ocasión frente a un Brahim negligente tras una contra local ya con el partido encendido tras la salida al césped de jugadores como Abdón, Darder, Vinicius o Camavinga, quien dio reposo a Bellingham.

La entrada del brasileiro alegró el paso al Madrid y sembró la inquietud en un Mallorca que precisaba irse arriba, mas no podía destaparse atrás. Dos disparo de Vinicius y una jugada en la que obsequió un centro que se paseó por la línea de gol le dieron al partido más vértigo. Quitaban veinte minutos y las dos porterías se veían conminadas, singularmente la local. Raíllo salvó un gol cantado de Valverde tras desborde de Vinicius antes que Lunin volara para sacar una volea de Darder. El encuentro estaba abierto y los dos se lanzaban directos a la quijada que no acababan de expedir a la tela al revés. Y así terminó el duelo, con la victoria mínima de un Madrid que debió padecer menos, mas que salió victorioso de Son Moix y llega a Manchester y al Tradicional del próximo domingo en el Bernabéu confiado de sus posibilidades.

TiroAlpalo