El Rayo confima su dulce inicio de Liga ante el Espanyol (0-2)

La ilusión se resquebrajó en la segunda jornada. El Espanyol recibió una muy dura dosis de realidad en la segunda presentación oficial del proyecto de Diego Martínez, perdiendo 0-2 frente al siempre y en todo momento sólido Rayo Vallecano de Andoni Iraola, que cosecha así su quinto triunfo sucesivo en frente de los pericos y otro buen resultado en la urbe de Barcelona. Los fallos y la poca consistencia penalizaron carísimo esta vez.
Las sensaciones del equipo en la primera jornada en Vigo tal vez no habían sido las más refulgentes en lo que se refiere a lo futbolístico, mas dejó claro el corazón que le imprimió Diego Martínez a su equipo, combatiendo hasta el final por cada balón. Y así salieron frente a los madrileños en su estreno en casa, procurando morder cerca de la portería de Dimitrievski en la presión tras pérdida, si bien con poca claridad para anotar.

Y daba la sensación de que el trabajo iba a ser más simple pasado el cuarto de hora merced a un fallo de Lejeune, reprendido al 14' por derruir a un contrincante y de nuevo al 16' por plantarle un codazo a Joselu en la cara a lo largo de un salto. Figueroa Vázquez no le disculpó, mostrándole el semáforo fatal derivado en roja y expulsión para el francés. Iraola se quedaba con diez hombres apenas empezando el duelo.

Mas no iba a servirle mucho a un Espanyol que asimismo se quiso boicotear a sí mismo. Sergi Gómez, particularmente, fue el responsable de tirar por la borda los planes de superioridad numérica, golpeando con alevosía a Camello en una jugada apartada que le VAR examinó para acabar dejando con diez a los de Martínez, que además de esto verían de qué manera caía su portería minutos después.

La segunda vida que tomó el Rayo fue suficiente a fin de que los de Iraola abriesen el lumínico en el RCDE Stadium. Isi Palazón aprovechó un tiro libre en la frontal para conjuntar con Unai Simón, percibir en corto y disparar con zurda en un ángulo realmente difícil, mas no imposible para colarla en la portería de Benjamin Lecomte, que procuró la estirada mas no pudo salvar el 0-1 rayista.

En la segunda parte, a pesar de los sacrificios del cuadro catalán estrellando pelotas en los palos con el ingreso de Javi Puado, el que repitió la dosis fue el Rayo, apoyándose en una enorme jugada de Álvaro por banda izquierda para rematar el trabajo con el gol de Pathe Ciss, que sentenció el encuentro con la victoria de los capitalinos y la amarga derrota en la primera presentación blanquiazul como local.

TiroAlpalo