En la mitad de un temporal de ventarrones y presión gaditana, el Cádiz destruyó la ilusión de mejora del Girona con un concluyentes 2-0. Los gerundenses, que llegaban tras vencer al Valencia, se vieron inferiores desde el principio del encuentro y se apuntaron la novena derrota de LaLiga -la tercera de 2023- para continuar anclados a una lucha que, si bien les coja lejos -son undécimos- prosigue avizorando en lo que se refiere a los puntos: tienen apenas 4 más que el Valencia, equipo que marca la 'zona roja'.

En la anterior los fuertes vientos conminaban con anular el partido, mas el futbol prosiguió adelante y, sobre el campo, los jugadores de Sergio González salieron a volar en la primera parte, presionando todos los intentos del Girona por salir con el balón en movimiento. Las rachas de velocidad de Ocampo fueron mortales para los gerundenses, que vieron caer su portería ya antes de enfrentar los diez minutos de partido.

El uruguayo se ideó una jugada por banda izquierda que acabó en un centro a Escalante. El argentino definió, primero mal con derecha y después bien con zurda, para batir a Gazzaniga y poner a padecer a los catalanes, que prosiguieron viendo como el viento los arrastraba: tras la media hora Guardiola se apuntó el segundo gol gaditano.

Para el segundo tiempo la pretensión fue mudar las cosas. Joel Roca, Riquelme y Callens brincaron al césped en vez de Toni Villa, Borja García y un reprendido Bernardo. Mas el Cádiz se acomodó en el jergón de los dos tantos, replegó líneas y consiguió sostenerse en el beneficio para sacar un triunfo clave en su lucha por la permanencia.