Un penalti amarga la jornada al Atleti (1-1) | VIDEO-RESUMEN + GOLES

Si algo no puede hacer un defensor en su área en estos tiempos es saltar con los brazos abiertos para despejar un balón bombeado. Y justo eso hizo Saúl, abrir demasiado el brazo al saltar y allá le fue a dar la pelota. Lo vio muy claro Mateu Lahoz, que apuntó el punto de penalti mientras que se sacaba del bolsillo la amarilla para el canterano rojiblanco. No había tirado entre los 3 palos el Getafe en ochenta minutos, lastrado por sus inconvenientes en el vestuario y sin ganar en todo cuanto va de 2023. Mas estaba cerca en el marcador y en el partido el conjunto del sur de Madrid, que halló oro en el Metropolitano con el penalti que le obsequió Saúl.
El obsequio no lo desperdició Enes Ünal, que lo chutó tan bien y tan fuerte, que no importó que Oblak adivinase que lo lanzaría a su derecha. El turco deseaba lucirse en un escaparate tan suntuoso como el Metropolitano y fue el Getafense que más cerca estuvo del gol en un par de lanzamientos desde fuera que pasaron cerca de la portería contrincante.

El Atlético había hecho más para marcar y por eso estaba por delante en el marcador cuando se enfrentaba la recta final. Es cierto que no fue una versión tan suntuosa como la que se pudo ver frente al Valladolid, al que liquidó en media hora, mas le bastaba para estar al mando. Y lo estaba merced a un gol de Correa que jamás ya antes se había visto en la historia del futbol, por el hecho de que el argentino lo marcó cuando ya había sido reemplazado. Realmente lo había anotado medio minuto ya antes, mas mientras que el VAR examinaba si estaba o no en fuera de juego fue alterado. Ya estaba sentado en el banquillo y con el sobretodo puesto cuando Mateu apuntó al centro del campo y validó el tanto, así que sus compañeros se fueron a abrazarlo a la banda y brincó de alegría desde el área técnica.

El Atlético llegó bien hasta el área del Getafe e inclusive se hallaba cómodo en esa zona, mas su inconveniente es que siempre y en toda circunstancia le fallaba el último pase, unas veces del propio Correa y otras de Griezmann, que no estuvo tan clarividente como otros días. Morata solicitó penalti prontísimo por un agarrón de Djené, que soltó a tiempo al delantero antes que la acción fuera clara para los agremiados. Hubiera sido aun la segunda amarilla y se le hubiese puesto la cosa en chino al Getafe.

Se sostuvieron en pie los de Quique Sánchez Flores sin muchos alardes, tratando de hacer largo el partido al contrincante. Todo se le vino encima cuando Lemar enganchó un buen disparo desde fuera del área, rechazado por Soria a las botas de Correa. No falló el mediapunta, que no estaba en fuera de juego.

TiroAlpalo