Mateo Kovacic no fue profeta en su tierra y su Chelsea cayó por la mínima frente al Dinamo de Zagreb, que supo contener los ataques de los ingleses tras el gol tempranero de Orsic. Thomas Tuchel rehizo el equipo al reposo, mas las dudas de los blues en la Premier se traspasaron a la Champions. Ni Aubameyang, que comenzaba, sacó del apuro al técnico alemán, aún con mucho por hacer.

Mas al Chelsea se le torcieron las cosas desde el comienzo con el vencedor de Croacia, que logró montar un contragolpe en el minuto 12 y dársela a Orsic. El enorme delantero del Dinamo tenía mucho terreno para correr, así que le ganó la partida a Fofana y se reclinó en el último momento para batir en el codo con codo a Kepa.

Era el 1-0 y la constatación de un bloqueo del Chelsea que se extendió a lo largo de toda la primera mitad. Mas Tuchel no aguardó y sacó del campo a Azpilicueta, que dio paso a Ziyech. Con el marroquí en la banda derecha, el equipo blue mejoró el ritmo del partido, comenzó a encadenar llegadas y el Dinamo no tuvo más antídoto que embotellarse en su área.

Una resolución atinada si te tiene presente que el equipo croata proseguía encontrando espacios a la contra, como en el 56′, cuando Ristovski lanzó un obús desde 30 metros y Kepa sacó una mano increíble que acabó con el balón en el larguero. La parada dejó con vida al Chelsea, que se fue a por el empate con Reece James como primordial estilete, si bien sus dos disparos asimismo hallaron la contestación de un soberbio Livakovic, que dio los 3 primeros puntos al Dinamo, para sorpresa de todos.