El Granada se mete en promoción gracias al gol de Uzuni (1-0) | VIDEO-RESUMEN + GOLES

El Burgos CF sumó en el Nuevo Los Cármenes su segunda derrota sucesiva en un buen partido de los de Calero, que no hallaron la opción alternativa para igualar el soberbio tanto de Myrtos Uzuni en el minuto 41. El cuadro blanquinegro medró en la segunda mitad, quitó el esférico al Granada en múltiples fases del partido y protagonizó un arreón final impulsado desde el banquillo con los cambios que no consiguió el propósito del gol merced al buen hacer protector de los nazaríes y la carencia de ideas del cuadro castellano.

Empezaba el partido en el Nuevo Los Cármenes con Calero solucionando la bastante difícil papeleta de armar un once renovado con Raúl Navarro, Artola y Juan Hernández como novedades ofensivas y Areso y Fran García como carrileros largos para aportar velocidad en los laterales en las transiciones veloces del equipo.

Meseguer, apenas en el primer minuto de partido, informaba a los burgaleses con un disparo desde algo más atrás de la media luna del área de Costoso que se fue desviado sobre el travesaño.

Como era de aguardar, los de Paco López pronto se hicieron con el control del balón frente a un Burgos bien plantado con las dos líneas frecuentes atrás y Artola amagando la presión para molestar la circulación de los rojiblancos.

El Granada presentaba una línea protectora alta, una de las que más arriba defiende de la Segunda División, para procurar ahogar la posible salida de balón burgalesa y recobrar lo antes posible el esférico.

Siendo consciente de ello, el cuadro burgalés procuraba las botas de Bermejo a fin de que idease uno de los múltiples pases medidos a la espalda de la defensa que ha completado este curso para poner en ventaja las carreras de Artola y Juan Hernández, que halló el espacio en el minuto 11 mas erró en el golpeo desde en el área.

El primer cuarto de hora bastó para vislumbrar la tónica del partido con un conjunto nazarí monopolizando el balón en busca del espacio entre una organizada y solidaria defensa blanquinegra que conectaba de forma intermitente ciertos chispazos de calidad con los que intranquilizar los dominios de Raúl.

En una de las pocas salidas veloces del Granada, el hurto de la zaga castellana tornó en un contragolpe bien dirigido por los burgaleses que llevó el riesgo a campo andaluz. Mumo sacó la varita y habilitó a Juan Hernández a fin de que Raúl repeliese la finalización del '15' visitante.

A pesar del gobierno del esférico impuesto por los de Paco López, con prácticamente un 70 por ciento de posesión, el Burgos se mostraba más incisivo y dirigió la media hora de encuentro protagonizando las ocasiones más peligrosas del partido en las botas de un eléctrico Juan Hernández.

Los de Calero, más cómodos sobre el césped que los granadinos, empezaron a ganar terreno a costa de un equipo andaluz falto de soluciones para percutir en el entramado protector frecuente del conjunto burgalés.

Mumo y Bermejo, bien instruidos por su adiestrador, identificaban los huecos a la espalda de los zagueros nazaríes en todos y cada balón en fase ofensiva para poner buenos balones que no lograban traducir en tantos los jugadores burgaleses.

Callejón, muy activo desde el principio del choque, era el atacante local que hacía cosas distintas para intentar agitar la poblada defensa visitante y localizar la forma de hacer daño al Burgos. Y su perseverancia tuvo premio.

En el minuto 41, cuando el partido parecía enfrentar el reposo con la igualada en el electrónico, el '9' del Granada controló un balón en el pico del área y cedió idóneo para que Myrto Uzuni, con el interior del pie y ante 3 defensas blanquinegros, se idease un efecto demoníaco frente al que Costoso solo pudo hacer la escultura y observar el primer tanto del choque.

Así, sin grandes ocasiones de riesgo, el Granada hacía servir su potencial ofensivo en las postrimerias de la primera mitad y el punta albanés probaba por qué es el pichichi de la categoría de plata del futbol de España.

Con el subidón del tanto, los de Paco López olieron la sangre y se lanzaron a por un Burgos aún doliente del tanto del delantero nazarí. Soportando los envítes locales, los de Calero resistieron lo justo a fin de que el agremiado señalase el camino de los vestuarios para poder digerir el golpe sin mayores consecuencias y planear la remontada.

Curro fue la solución incluida por el técnico madrileño del Burgos para dar contestación al gol local y asentar al equipo sobre el verde para regresar al guion que le había dado buen resultado en una gran parte de la primera mitad.

Mas fue el Granada el que metió el temor en el cuerpo primero a los blanquinegros a través de un balón largo a la espalda de la defensa burgalesa que los nazaríes acabaron con un disparo desviado a la derecha de la portería protegida por Costoso.

Nuevamente remataban los locales en el minuto 51, esta vez de cabeza, a través de Ignasi Míquel un balón que se marcho cerca del palo izquierdo de la meta blanquinegra.

Reaccionó a continuación el Burgos en una jugada bien hilada que concluyó Mumo y salió por sobre los 3 palos tras pegar en la mano de un zaguero granadino que el ábitro no consideró punible al estar pegada y sin ocupar un espacio antinatural.

Controlaban el tempo del partido los de Paco López, apretando cuando veían los espacios y exponiendo un juego más horizontal para aliviar los intentos de contragolpear de un cuadro burgalés que deseaba el empate mas no hallaba la fluidez precisa para desmantelar la defensa local.

Medraba con el paso de los minutos el conjunto castellano urgido por el reloj cronómetro mientras que los andaluces trataban de dormir el encuentro con el balón y repelían las acometidas visitantes de los de Calero, que dieron un paso adelante para edificar jugadas más cerca del área del portero granadino.

A diez minutos para el final, el preparador blanquinegro quemó las naves con la entrada de Saúl Berjon por Atienza para intentar aportar más verticalidad y criterio en unos ataques burgaleses que no conseguían atemorizar al Granada.

Deseaba encajonar el Burgos a los de Paco López para sumar el empate en el marcador y a punto estuvo de hacerlo a través de Curro tras un buen centro desde la izquierda de Saúl Berjon y la mejor dejada de Valcarce para el tiro del '16' burgalés y la atajada de Raúl.

Con los castellanos atacando a tumba abierta, Uzuni y Perea procuraban aprovechar los espacios para matar el partido. En esas, el cuarto árbitro adivritó algo desde el banquillo burgalés y expulsó a Bermejo frente a la incredulidad blanquinegra.

Con los 5 minutos de añadido, el Burgos echó -si le quedaba algo- el resto y aumentó aún más la presión e intesidad sobre un cuadro nazarí que soportaba el tirón con el aliento de su afición.

Sin localizar la opción alternativa para producir ocasiones claras, los de Calero movían el balón a la agobiada cara arriba y los andaluces se defendían como gato panza arriba para sostener una ventaja que por último consiguió retener para firmar la segunda derrota sucesiva del Burgos.

TiroAlpalo