Estreno soñado del Valencia para sumar los tres puntos en el Pizjuán (1-2) | VIDEO-RESUMEN + GOLES

Tras terminar la pasada temporada a máximo rendimiento, el partido de Diego López y la llegada de Javi Guerra en el momento de partido para marcar el gol que le dio los 3 puntos al Valencia, fue un genuino escándalo. Otro riesgo para el argumento de Meriton. En un club con colmillo, esas perlas medran deportivamente al lado del equipo para buscar esos objetivos que semejan ya de una temporada en blanco y negro para la entidad de Mestalla.
El dolor para el valencianista es meditar que son jugadores que más pronto que tarde (como pasó con Carlos Soler o Ferran Torres) van a tener el cartel de 'se vende' en la camiseta. El Valencia de los chavales se ganó el respeto en Sevilla. Un orgullo de equipo que probó que puede medrar este año en la Liga si Lim autoriza los refuerzos.

Los de Baraja estiraron una curiosa ráfaga que dicta que no pierde un primer partido liguero fuera de casa desde hace 23 años y logró cerrar una de esas que explican el cambio de ciclo –para mal– que ha tenido en la Liga en los últimos tiempos. Hasta el día de ayer, amontonaba 9 partidos sin ganar al Sevilla. La victoria, que gozaron los múltiples cientos de valencianistas presentes en las gradas, fue la tercera desde 2005 en el Pizjuán. Las otras dos, curiosamente, fueron con Marcelino.

El plan de partido le salió perfecto a Baraja. No fue la primera vez que Diakhaby jugó de mediocentro desde el momento en que viste la camiseta valencianista –lo usó por poner un ejemplo Marcelino en la semifinal de la Europa League contra el Arsenal en 2019– mas esta vez la apuesta fue ganadora. El central no desentonó al lado de Pepelu, ya lo hizo en pretemporada, y puso la guinda marcando el primer gol del partido. Son solo 3 puntos mas viniendo del sufrimiento extremo, y de una mala campaña en los partidos fuera de casa, la victoria tiene un valor de considerablemente más valor.

El único riesgo real en la primera parte para los valencianistas fueron las dos amarillas que vieron sus futbolistas –Diakhaby y Cenk– en las dos primeras faltas del equipo. Habían pasado solo 15 minutos de juego. No lo supo aprovechar el Sevilla, cuyas aproximaciones a Mamardashvili se debieron a algún distraiga exactamente de los reprendidos, y el Valencia se fue asentando hasta dar la sensación de ser un equipo ordenado para las pocas armas que tiene. La enorme ocasión de gol ya antes del reposo fue el mejor ejemplo. Una internada de Fran Pérez por la derecha, en el minuto 34, acabó en un buen centro que Diego López transformó en un taconazo, rozando tenuemente el balón con la bota derecha estando de espaldas, que pasó besando por el exterior el palo izquierdo de Bono. El asturiano ya lo había intentado un poco antes con un disparo que le salió un tanto alto. Promete ser, tras su gran final de temporada, una de las sensaciones en la que termina de comenzar.

Tras el reposo, el Sevilla apretó buscando el primer gol mas el Valencia se hizo fuerte entendido de que su buena primera parte le iba a permitir tener opciones. Para esto fue clave que Pepelu se regalase una enorme segunda parte para festejar su aniversario. El de Dènia medró sobre el césped y su equipo lo agradeció. Tuvo en sus botas la primera gran ocasión, si bien fue su compañero en el centro del campo el que se transformó en el enorme protagonista de la victoria.

Una buena internada de Fran Pérez, otro de los señalados por su trabajo, extendió el balón a Almeida, que habilitó una asistencia que embocó al primer toque Diakhaby para adelantar al Valencia a los 59 minutos. Un justo premio a lo que veía sobre el césped y que fue la antesala de la enorme prueba para la corta plantilla, esa es la realidad, que tiene Baraja.

Al Sevilla le sentaron bien sus cambios. La entrada de Oliver Torres y Sow le dieron más mordiente y llegó el empate. Tras un buen servicio de Suso, Paulista perdió la marca de En-Nesyri, distrajo a Mamardashvili con ese movimiento, y el georgiano se quedó a media salida presenciando el remate del delantero. Cuando todo daba la sensación de que esa falta de jugadores de refresco podía penalizar al Valencia, Hugo Duro forzó la expulsión de Badé en el minuto 80 y 8 después, tras un buen hurto de Gozálbez, asistió a Javi Guerra a fin de que el de Gilet marcase otro golazo al máximo. Como aquella noche frente al Valladolid. Un tanto que festejó con saña al lado de sus compañeros.

TiroAlpalo