El Rayo Vallecano logró el primer triunfo de la época tras derrotar por 0-2 al Almería. Lo procuró el conjunto andaluz, mas apenas pudo reprender a su contrincante, que se llevó los 3 puntos merced a 2 tantos de penalti. El balón echó a correr en la Primera División y Almería y Rayo fueron los encargados de abrir la veda. No obstante, solo fue el conjunto franjirrojo el que descorchó el champán en lo que fue su primer día de clase.

Los de Francisco, que cumplió su último partido de sanción en la grada, tomaron el control en los primeros acompases del choque. Así, se aprovecharon de un cuadro andaluz que aún estaba dormido y pecó de exceso de inocencia.

Tanto que, en una jugada sin apenas riesgo, el conjunto visitante iba a encontrarse con un inopinado premio en forma de penalti. Nteka ahogó a Edgar en la presión y el defensor, inocente, levantó el pie más de la cuenta cuando iba a pegar el balón e impactó en el pecho del delantero. Isi fue el responsable de convertir la pena máxima con gran sutileza y calma.

Estaba muy cómodo sobre el terreno de juego el conjunto de Francisco. En ningún instante se vio reprendido por su contrincante y, poco después, volvió a contar con de otra ocasión para ampliar su ventaja. Una vez más, desde el punto de penalti.

Balón colgado al área que ganó de cabeza Aridane, mas el esférico se estrelló de forma clarísima en el brazo de Akieme. Nteka lanzó con potencia y engañó a Mariño, que se lanzó al lado contrario.

En la recta final, el Almería sí sacó su orgullo y empezó a reprender la portería de su contrincante. No obstante, surgió un inspirado Dimitrievski que desbarató, doblemente, las ocasiones de Luis Suárez a quemarropa.

El Almería salió con otra cara en la segunda mitad. Mucha culpa de ello tuvo Arribas, que se estrenó con su equipo nuevo y desde el primer minuto ya dejó claro que le iba a venir realmente bien a Vicente Moreno a lo largo de todo el curso. El ex jugador del Real Madrid puso desborde y desequilibrio por la banda y le dio una lozanía extra a su equipo.

Sin embargo, solo con los méritos no es suficiente. El cuadro indálico se aproximó a la portería de Dimitrievski, mas ninguna de esas ocasiones pusieron en serios aprietos a su contrincante. Y ya saben, en esto del futbol, lo esencial son los tantos.

El partido entró en un terreno pantanoso, mas el Rayo Vallecano no se vio intranquilizado en ningún instante. Siendo francos, se mereció un gol, cuando menos, el Almería, mas es que Aridane se erigió como la genuina torre de la defensa franjirroja.

El nuevo fichaje sostuvo a raya a su equipo contrincante y apenas entraron en juego sus delanteros, siempre y en toda circunstancia encimados por el zaguero. El choque entró en su recta final y el marcador ya no se movió más.

Victoria y buena actuación del Rayo Vallecano en su primer día blog post Iraola, probando que sostiene las bases del pasado curso y que, un año más, desea ser una de las revelaciones de la época y aspirar a lo máximo.