Jude Bellingham tiene algo singular y volvió a probarlo frente al Getafe en el estreno del renovado Santiago Bernabéu. El futbolista inglés se presentó a su nuevo estadio con un gol sobre la bocina que sirvió para darle al Real Madrid los 3 puntos en un encuentro que se le puso cuesta arriba desde el principio (2-1). Si alguien se imaginó un guion cómodo para el Real Madrid, se confundió de película.

El Getafe deseó contar su historia imponiendo su idea desde el comienzo y Fran García cooperó con los azulones para realizarla. Un fallo del lateral en un pase atrás dejó solo a Mayoral ante Kepa. El delantero definió con calidad regateando al meta vasco y adelantó a su equipo a los once minutos.

Desde ahí, hay que resaltar un nombre propio: David Soria. El portero del Getafe se agrandó frente a las continuas embestidas blancas. Acabó el encuentro con diez paradas y desesperó a los blancos a lo largo de la mayoría del partido. El Real Madrid se desquició con el meta azulón y con Melero López, al que demandó un penalti sobre Bellingham y una tarjeta roja al propio portero del Getafe por mano fuera del área.

El único capaz de romper el muro visitante fue Joselu, que aprovechó un rechace de Djené en el área para batir a Soria solamente empezar la segunda mitad. Lo hizo en otra jugada polémica, ya que los azulones solicitaron fuera de juego del atacante gallego.

El tramo final fue un acoso y derribo blanco sobre la meta Getafense que daba la sensación de que no iba a tener premio. Los postes (hasta 3 dieron los merengues) se asociaron con Soria y privaron al Madrid del segundo gol hasta el tiempo de descuento, instante en el que tuvo lugar el único descuido del portero visitante. El ex meta del Sevilla no pudo apresar un disparo lejano de Lucas Vázquez y Bellingham, tal y como si de Raúl González se tratase, apareció en el sitio preciso para empujar el balón a la red y desatar el desvarío del Bernabéu.