El Inter de Milán pone pie y medio en semifinales de la Champions. Los italianos superaron (0-2) con relativa sencillez a un Benfica sin gol merced a los tantos de Barella y Lukaku. Los locales empezaron el partido con considerablemente más posesión que el equipo de Inzaghi, mas los triCampeones de Europa aprovecharon la inocencia lusa para anticiparse con un cabezazo del mediocentro al segundo palo.

El segundo tiempo avanzaba y el Benfica no era capaz de acercarse a la meta protegida por Onana y lo acabó pagando. El agremiado señalaba una mano de Joao Mario a diez del final y Lukaku no disculpaba desde los once metro. El equipo del estadio da Luz va a deber tirar de hazaña para remontar dos tantos en el estadio Giuseppe Meazza en unos días.

En un estadio de Da Luz a rebosar, el Benfica salió al césped de su feudo con ganas de hacerse dueño y señor de la pelota frente a un Inter que atravesaba un instante de forma muy frágil en la Serie A. Los primeros acompases se disputaron en el centro del campo con el conjunto luso moviendo la pelota a su antojo con Florentino y Chiquinho como comandantes en la sala de máquinas.

La primera ocasión del duelo fue exactamente de los lusos. Centro por banda izquierda de Rafa Silva, Dimarco no consigue despejar con certidumbre y Ramos realiza un disparo que obLiga a Onana a sacar sus mejores reflejos para sacar el primer golpeo entre los 3 palos de los dos conjuntos. La ocasión local alentó a los italianos que comenzaban a colgar balones a través de Dumfries y Dimarco en los dos costados.

Dzeko, referencia interista en ataque, estuvo a puntito de adelantar a los suyos tras un enorme centro de Barella al segundo palo que no hallaba rematador por milímetros. En la jugada siguiente, exactamente el mismo asistente, mas esta vez Dimarco ponía el esférico al centro del área buscando un compañero que llegara desde segunda líne para empujar la pelota en el fondo de la red sin premio.

El segundo tiempo comenzó muy, muy diferente al primer tiempo. El equipo de Inzaghi se adelantaba en el primer acercamiento tras un remate de cabeza picado al segundo palo tras aprovechar un centro excepcional de Bastoni. La eliminatoria se abría con el gol del mediocentro y lo hacía frente a un equipo que había abrumado en la fase de conjuntos y en octavos.

Los 'Nerazzurri' pudieron ampliar diferencias en un partido más que bloqueado, mas Mkhitaryan erraba ante Vlachodimos en el codo con codo. Gosens filtraba un muy grande pase entre líneas, si bien el mediocentro armenio no lograba superar al portero heleno cuando ya se cantaba el segundo de los visitantes que dejaba la eliminatoria muy cuesta arriba para los de Schmidt.

El duelo avanzaba y los dos equipos comenzaban a proteger con menos intensidad. Grimaldo tuvo el empate en sus botas con una volea que mandaba fuera en el costado zurdo y Barella respondía con un latigazo que se iba desviado a falta de 15 para el final. Si la del mediocentro había sido peligrosa, el Inter iba a contar con de una doble ocasión con Dumfries como protagonista. Enésimo centro de Bastoni al segundo palo, el holandés remata de cabeza y en el rechace, Morato la saca cuando ya se introducía en la portería.

No obstante, en exactamente la misma jugada iba a generarse el penalti que significaría el segundo de los italianos. El agremiado es llamado por el VAR por una posible mano de Joao Mario tras el centro de Dumfries e señalaba la pena máxima que no fallaría Lukaku para encauzar la eliminatoria en el partido de ida.

En el descuento, el Benfica apretó con las subidas del de España Grimaldo, mas el marcador no volvió a moverse. ni tan siquiera con la salida de Guedes al verde, viejo conocido de la Liga de España. Ramos pudo mudar todo con un codo con codo en la última ocasión, si bien allá estaba Onana para eludir el tanto luso e irse al partido de vuelta con dos de ventaja.