Colombia llegaba al Mundial femenino de Australia y Nueva Zelanda como un equipo atrayente que despertaba entusiasmo: tras un desempeño señalado en la Copa América de 2022, la mezcla de jugadoras referentes del futbol nacional, como Catalina Usme y Daniela Montoya, con nuevos talentos como Linda Caicedo y Leicy Santurrones, ponía las esperanzas altas. Este lunes, el equipo respondió a ese entusiasmo al derrotar con suficiencia 2-0 a Corea del Sur, en su debut en el conjunto H de la Copa Mundial Femenina de Australia y Nueva Zelanda.

El adiestrador Nelson Abadía optó por una capacitación frecuente con 4 defensas, dos volantes de contención, una armadora, dos extremas y una atacante para el partido disputado en el estadio de Sídney. Los primeros 30 minutos del partido transcurrieron entre los intentos persistentes de una Corea del Sur incisiva con los tiros de costado, los lanzamientos de fuera del área y la busca de rebotes, y una Colombia que trataba sin éxito de hilvanar jugadas colectivas que no prosperaban, prácticamente siempre y en toda circunstancia por alguna imprecisión en los pases. Mas en una seguidilla de remates de las Colombianas, que se comenzaban a aproximar a la portería contrincante, un disparo que iba hacia puerta chocó en el área con el brazo que una defensora surCoreana tenía separado del cuerpo. La árbitra británica Rebecca Welch no vaciló en pitar el penalti.


Catalina Usme engañó con frialdad a la portera Yoon y anotó el primer gol del partido, el segundo de ella en los 7 partidos que ha disputado en Copas del Planeta. Entonces el panorama cambió para Colombia. Las imprecisiones comenzaron a desaparecer, el equipo se mostró más confiado y concentrado, y pronto el marcador volvió a acrecentar. En el minuto 39, Linda Caicedo, que hasta ese momento había mostrado una actitud más colectiva y había intentado asociarse con sus compañeras más que resaltar con sus habilidades, recibió el balón en medio de la cancha e comenzó un ataque por la banda izquierda. Eludió a las contrincantes que procuraban bloquearla y lanzó un disparo elevado que parecía simple de supervisar para la arquera, a quien se le escapó el balón de las manos para cruzar la línea de gol.

En el segundo tiempo, Colombia prosiguió insistiendo para acrecentar el marcador, con cierta frecuencia desde centros desde el costado para buscar la cabeza de Mayra Ramírez, la más alta del equipo. Sus intentos por venir a la portería contrincante tenían considerablemente más seguridad, entusiasmo y se valían de múltiples recursos. Además de las atacantes Colombianas, siempre y en toda circunstancia en el centro de atención, la portera Catalina Pérez resaltó por su seguridad en las veces en que debió intervenir, prácticamente siempre y en todo momento acompañada por un respaldo eficiente de Manuela Vanegas en la defensa. Las surCoreanas sostuvieron el orden e procuraron edificar jugadas de ataque, sin éxito: la gracia que tuvieron al principio del partido fue opacada por las Colombianas, que sostuvieron el control y la superioridad hasta el final del juego.

El próximo partido de Colombia en el Mundial femenino va a ser ante Alemania, el último día de la semana 30 a las 4.30 (hora Colombiana). El equipo europeo se colgó el rótulo de preferida a batallar el título el primer día de la semana por la mañana, al vencer 6-0 a Marruecos. Una combinación de fallas de las jugadoras africanas con las virtudes y la potencia de las alemanas, singularmente en el juego aéreo, llevaron a un marcador voluminoso que puso a las subcampeonas de Europa como líderes parciales del conjunto H. El último partido de Colombia en fase de conjuntos va a ser ante Marruecos, el 3 de agosto a las 5 de la mañana.