En el infierno de Mestalla, el Girona probó de nuevo que repetir el nivel mostrado la temporada pasada va a ser prácticamente imposible. El aparato podrá poner toda su buena voluntad , aun los nuevos fichajes podrán dar cosas que antes no tenía Michel, si bien semeja ineludible omitir un descenso en la calidad de la plantilla. El equipo gironí sucumbió ante el colista de la competición, el Valencia, que sumó sus primeros tres puntos de la temporada (2-0).
Era un equipo con varios cambios el que presentaba Michel en Mestalla con en comparación con exhibido en el Parque de los Príncipes. Sin Miguel Gutiérrez, Arnau, David López, Iván Martín, Van de Beek, Tsygankov, Bryan Gil o Stuani, el Girona se medía a un Valencia colista que no había conseguido sumar ninguna victoria todavía esta temporada. Después de la resaca de la Champions, el partido se presentaba como un arma de doble filo donde los gironins deberían estar a su máximo nivel para sacar los tres puntos del feudo valencianista.
El Girona salió advertido de las adversidades del partido y salió al lote de juego dominando desde el primer minuto. si bien sin hacer demasiado riesgo. Tras solamente inquietar el área contrincante en Champions, el aparato volvió a exhibir varios problemas en tres cuartos de campo. El vacío que dejaron las marchas de jugadores como Savinho o Dovbyk semeja , por el momento , imposible de completar.
Quien mucho más participativo estuvo terminó siendo Danjuma, que procuró cargar el peso del aparato por banda izquierda. Sin embargo , la sensación de fragilidad en el Girona era bastante para que el equipo no se animara como siempre a apretar arriba. El Valencia salían con mucho riesgo a la contra -dirigidos por un enorme Pepelu- al paso que los gironins solamente conseguían inquietar a Mamardashvili a pesar de tener la posesión del balón.
Tras el paso de vestuarios, al Girona bien le podrían haber puesto un mal de ojo; a puntito de llegar a la hora de partido, un fallo en la salida de balón del Girona acabó en las botas de Luis Rioja, que procuró un tiro muy alejado con la fortuna de rebotar en las piernas de Juanpe. El balón, que llegaba sin solamente riesgo , terminó sorpendiendo a Gazzaniga para alegría de Mestalla que se venía arriba con el tanto de su aparato (1-0).
La mala suerte no terminó ahí; apenas dos minutos después, Dani Gómez intentó un nuevo disparo alejadísimo y, otra vez, Juanpe tuvo la mala fortuna de rozar el balón con sus piernas y acabó ingresando el balón en su propia portería (2-0). No era el día ni tampoco el del Girona, que suma su tercera derrota consecutiva entre Champions y Liga.