El Betis completa su triunfo más claro y concluyentes de la época dirigido por un chico de 18 años que cuenta sus participaciones por tantos. El tanto de Assane Diao al filo del reposo abrió un partido que el Valencia había sabido 'cerrar' y dejó la goleada, completada por los tantos de Marc Roca y Ez Abde. De entrada, Pellegrini repitió una gran parte del equipo que tan buen partido hizo en Granada. Assane Diao pudo comenzar ante su afición y Ayoze repetía en punta, postergando a Borja Iglesias al banquillo.
En el Valencia, Baraja sorprendía con la titularidad de Yaremchuk y Gozálbez, mas más aún con la de André Almeida, que apenas se había recuperado esta mañana de la lesión que padecía.
Si bien el equipo che comenzó presionando y tratando de ser protagonista, mas aceptó su rol y le dio el balón al Betis para ir a buscar los espacios a la contra. Desde ahí, el resto de la primera mitad fue un monólogo verdiblanco.
El Betis tenía clarísimo de qué forma jugar y procuraba continuamente la espalda de los laterales improvisados que hoy había puesto Baraja. Tanto por la derecha Assane Diao y Bellerín como por la izquierda Miranda y Rodri conseguían una y otra vez llegar a situación de centro.
La primera ocasión clara llegó al cuarto de hora, con un remate de Rodri, al que tocaron por detrás y no pudo rematar bien. El árbitro no estimó que fuera suficiente para pitar penalti.
El Betis llegaba de sigo y ponía muchos balones en el área, mas no hallaban un rematador en una zona donde Ayoze estaba en desventaja con Diakhaby y Gabriel Paulista. Y los pases atrás siempre y en toda circunstancia hallaban los pies de algún defensa che.
No obstante, tanto llegó el jarro a la fuente que terminó rompiéndose. Fue con una falta lateral que Isco puso en el área, la defensa che no consiguió sacar y el balón le llegó a Assane Diao, quien definió con mucha calma.
El tanto llegaba inmediatamente antes del reposo y daba calma a un Betis que, a pesar de los cambios ofensivos de Baraja, salió a sentenciar.
Y lo consiguió bien pronto. Pudo hacerlo con un disparo de Isco Alarcón que Mamardashvili, el mejor de su equipo, consiguió tocar para mandarla a córner tras tocar en el palo. Mas de ese córner llegó el segundo, obra de Marc Roca, tras anticiparse a la defensa.
Con el 2-0, el Betis ralentizó su posesión y bajó el ritmo del partido frente a un contrincante que corría ineficazmente tras el balón. Tan claro vio el partido Pellegrini que comenzó a desplazar el banquillo y a dar reposo a Isco Alarcón, Ayoze, Assane... Y su equipo, lejos de padecer, cada vez se mostraba más peligroso.
En parte asistía la actitud del Valencia, que ya se fue cara adelante y dejó espacios a su espalda. Rodri y Borja los aprovecharon para marcar, mas el asistente marcó su situación antirreglamentaria. Mas en la enésima contra, Ez Abde, que terminaba de entrar, se estrenó como goleador en el Villamarín tras enviar el balón a la escuadra. Era el mejor epílogo a la victoria más plácida y concluyentes de la época.
Si bien el equipo che comenzó presionando y tratando de ser protagonista, mas aceptó su rol y le dio el balón al Betis para ir a buscar los espacios a la contra. Desde ahí, el resto de la primera mitad fue un monólogo verdiblanco.
El Betis tenía clarísimo de qué forma jugar y procuraba continuamente la espalda de los laterales improvisados que hoy había puesto Baraja. Tanto por la derecha Assane Diao y Bellerín como por la izquierda Miranda y Rodri conseguían una y otra vez llegar a situación de centro.
La primera ocasión clara llegó al cuarto de hora, con un remate de Rodri, al que tocaron por detrás y no pudo rematar bien. El árbitro no estimó que fuera suficiente para pitar penalti.
El Betis llegaba de sigo y ponía muchos balones en el área, mas no hallaban un rematador en una zona donde Ayoze estaba en desventaja con Diakhaby y Gabriel Paulista. Y los pases atrás siempre y en toda circunstancia hallaban los pies de algún defensa che.
No obstante, tanto llegó el jarro a la fuente que terminó rompiéndose. Fue con una falta lateral que Isco puso en el área, la defensa che no consiguió sacar y el balón le llegó a Assane Diao, quien definió con mucha calma.
El tanto llegaba inmediatamente antes del reposo y daba calma a un Betis que, a pesar de los cambios ofensivos de Baraja, salió a sentenciar.
Y lo consiguió bien pronto. Pudo hacerlo con un disparo de Isco Alarcón que Mamardashvili, el mejor de su equipo, consiguió tocar para mandarla a córner tras tocar en el palo. Mas de ese córner llegó el segundo, obra de Marc Roca, tras anticiparse a la defensa.
Con el 2-0, el Betis ralentizó su posesión y bajó el ritmo del partido frente a un contrincante que corría ineficazmente tras el balón. Tan claro vio el partido Pellegrini que comenzó a desplazar el banquillo y a dar reposo a Isco Alarcón, Ayoze, Assane... Y su equipo, lejos de padecer, cada vez se mostraba más peligroso.
En parte asistía la actitud del Valencia, que ya se fue cara adelante y dejó espacios a su espalda. Rodri y Borja los aprovecharon para marcar, mas el asistente marcó su situación antirreglamentaria. Mas en la enésima contra, Ez Abde, que terminaba de entrar, se estrenó como goleador en el Villamarín tras enviar el balón a la escuadra. Era el mejor epílogo a la victoria más plácida y concluyentes de la época.