El Barça "tira" su remontada en el tramo final del partido (3-5) | VIDEO-RESUMEN + GOLES

Tras la dura supresión en los cuartos de la Copa frente al Athletic en San Mamés, el Barça precisaba una reacción y un golpe encima de la mesa para no perder el tren de la Liga. Esta llegó, mas se quedó a medias. Los barcelonistas bogaron a contracorriente, tras ponerse 0-2 por detrás en el marcador, tras dos fallos protectores resonantes. Gündogan, Pedri y Bailly en propia puerta desataron la insensatez en Montjuïc, que fue suplantada por la incredulidad y los pitos con 3 jarrones de agua fría de Guedes, Sorloth y Morales en el tramo final para cerrar el 3-5 final.
Dallas, Las Palmas, Barbastro, Riad, Salamanca, Sevilla y Bilbao. Son los 7 escenarios en los que el Barça ha jugado desde el instante en que subió por última vez a Montjuïc. A casa. Más de un mes -38 días, específicamente- el Barça volvió a jugar ante su afición. Y había ganas: 46.229 espectadores llenaron las gradas para transformarlo en la segunda mejor entrada del curso.

Premio y galones para Héctor Fort comenzando en Liga en el lateral zurdo, tras la lesión hasta el final de la época de Balde. Cancelo empezó en el banquillo, igual que Pedri y Ferran Torres. Xavi apostó por Oriol Romeu en la situación de pivote, retornando a la titularidad en un encuentro liguero un par de meses después. En la delantera, se sostuvo Lamine Yamal por la derecha, aparte de Joao Félix.

El Barça prosigue abonado al género de suspense en los primeros acompases de los partidos. Esta vez, no obstante, no acabó en desgracia. El Villarreal se adelantó en el marcador con un golazo de Baena por el palo corto y sin ángulo, mas partiendo de una clara situación de fuera de juego. El agremiado terminó anulando el tanto y se sostuvo el 0-0 en el marcador.

El Villarreal volvió a anticiparse en el marcador, obra de Gerard Moreno, mas, de nuevo, el tanto fue cancelado por fuera de juego de Sörloth, aparte de una falta anterior de Baena sobre Kounde en exactamente la misma acción.

A pocos minutos de enfilar el túnel de vestuarios, el Villarreal tuvo luz verde para festejar su tanto. A la tercera fue la vencida. Saque de banda de Alberto Moreno cara Sörloth, recibió de espaldas ante Oriol Romeu y a la media vuelta asistió a Gerard Moreno, que se desmarcó de Christensen con una sencillez asombrosa. Los groguets se fueron con ventaja al reposo entre ciertos pitos de la afición barcelonista a sus jugadores.

Xavi no deseaba que se le escapara el partido y no se aguardó al frecuente minuto 60 para efectuar cambios. 3 hombres de refresco tras el descanso: Cancelo, Cubarsí y Pedri reemplazaron a Héctor Fort, Christensen y Oriol Romeu en la busca de una reacción.

Del posible 1-1 al 0-2. Bailly arrolló a Lamine Yamal dentro del área sin que Munuera Montero señalase penalti. Prácticamente, en la jugada siguiente, un fallo resonante e inexcusable de Cancelo dejó a Ilias solo ante Iñaki Peña. El exculé -que comenzó en el primer partido de Xavi como técnico del Barça- avanzó metros, recortó a Iñaki sin despeinarse y anotó a placer el segundo del submarino amarillo. La ley del ex volvió a cumplirse.

El equipo no lanzó la toalla y volvió a conectar con la afición desde las botas de Gündodan. El alemán, partiendo hoy como el centrocampista más avanzado pisando 3 cuartos de campo, anotó de primeras desde la media luna con un disparo raso, distanciado de los guantes de Jörgensen.

En apenas diez minutos, el equipo le dio la vuelta al partido. Pedri puso el empate, cazando un balón fallecido en el área y superando al muro amarillo entre el canario y la portería. El equipo se lo creyó y remontó con un cabezazo en propia de Bailly, tras una refulgente falta servida por Gündogan para desatar la alegría en la montaña mágica.

Todo parecía estar visto para sentencia. Remontada épica del Barça para no perder el tren de la Liga. El punto de cambio parecía haber llegado, mas con este equipo no se puede cantar victoria ya antes de tiempo. Incomprensiblemente -o no tanto- el Barça encajó 3 tantos en entre el minuto 84 y el descuento. Comenzó Guedes con la sangría, prosiguió Sorloth y remató Morales en una tarde funesta y en una cadena de fallos protectores inexcusables. Tras el gol del portugués, un penalti no señalado por manos claras de Cuenca en el área, pese a comprobarlo en el VAR. Pudo haber alterado por completo el guion del partido suponiendo el 4-3, mas el partido terminó 3-5. Vergüenza y abatimiento. Un equipo futbolísticamente hundido y mentalmente superado.

TiroAlpalo