Sainz (2º) mantiene la ilusión, tras la decepción de Alonso (9º) en Catalunya

El Gran Premio de España de Fórmula 1 ha vivido este sábado una sesión de clasificación alocada y surrealista, en la que la lluvia dejó de caer mas condicionó una pista inmanejable. Verstappen hizo la pole con más suficiencia que jamás, en su primer intento de Q3 con un tiempo fenomenal (1.12.272) al que solo se pudo aproximar Carlos Sainz, en primera línea para el último día de la semana alentado por la afición de España a 4 décimas del holandés.

Semeja, por ende, que mañana no va a haber sorpresas a la cabeza, por el hecho de que Verstappen es una fuerza de la naturaleza que no semeja tener debilidades, si bien en Fórmula 1 nada está escrito. Para muestra, sin ir más allá, esa clasificación que dominó con puño de hierro. No obstante, el resto de los mortales padecieron, y de lo bonito, entre ellos el otro héroe local, Fernando Alonso.

Es verdad que Haas, Alpine y McLaren semejan haber dado un paso adelante en Barcelona con las mejoras, mas no era normal verles tan por delante de Aston Martin. Stroll consiguió defenderse algo mejor, mas el asturiano se condenó a sí mismo cuando en su primera vuelta en la Q1 no cogió bien la curva 14 cara línea de meta y se pegó una escapada por la grava. El fondo plano de su AMR23, con seriedad dañado.

Aún así, pudo pasar a Q2 y después a Q3, padeciendo siempre y en toda circunstancia, mas lo hizo. Los que no pudieron fueron Leclerc primero, en Q1, cayendo a la decimoséptima situación para la parrilla del domingo. Incomprensible su desempeño viendo el de Sainz con el SF-23. Poco después, siguiendo su ejemplo, fueron Russell y Pérez los que no pasaron de Q2. El mexicano fue undécimo, seguido del inglés, que rindieron muy bajo lo mostrado por sus compañeros.

Como afirmamos, Alonso se salvó, mas la Q3 no era ya para él. La esperanza por la pole ya se ocupó de machacarla Verstappen para el resto en ese primer intento solamente abrirse el tiempo, mas la imagen de los mecánicos de Aston Martin trabajando desesperadamente en los bajos del bólido verde de Fernando asimismo daba a comprender lo que se podía espera de él. Mucho consiguió con un turismo con seriedad dañado, quizás más aun de lo que parecía en TV, y fue noveno solo por delante de Piastri.

Por delante, Sainz voló para regocijo de una afición algo desilusionada y triste por su ídolo ovetense, mas no parecía suficiente para una grada hambrienta de triunfos de los suyos. Norris fue tercero a una décima de su ex compañero y amigo, con Gasly, Hamilton, Stroll, Ocon y Hulkenberh delante del bicampeón de España, que mañana sabe que debe sacarse de la chistera una de sus clases magistrales para escalar situaciones y soñar, cuando menos, con el pódium. La 33, desgraciadamente, aún va a deber aguardar.

TiroAlpalo