El Real Madrid luchó un partido muy complicado de principio a fin contra un Bayern competitivo hasta el momento en que el árbitro pitó la conclusión del encuentro. En lo que se refiere a los más señalados, Tavares fue una pesadilla para Othello Hunter, que no pudo pararle en la zona, como el resto de sus compañeros, si bien el americano fue clave para su equipo desde el tiro exterior.

Por otra parte, los blancos no tuvieron el mejor juego ofensivo, y tampoco protector, ya que los alemanes anotaron desde el triple de forma sencillísima en la primera mitad, no así en la segunda, cuando, verdaderamente, los dos conjuntos fallaron hasta 7 lanzamientos sucesivos alternándose cada posesión. De cualquier forma, los de Chus Mateo precisan progresar en las dos unas partes de la cancha si desean cerrar los partidos correctamente, ya que ante contrincantes de una mayor entidad, los finales se atragantaban.

El primer cuarto comenzó con los dos equipos fallando sus tiros y precipitándose en sus posesiones, si bien sería Hunter por un equipo y Tavares por otro quienes verdaderamente probaron su calidad. Goss sería el primer jugador que quizás procuró romper la zona con múltiples entradas, forzando múltiples faltas y asimismo puntos parcialmente fáciles. Por otra parte, Abalde fue el base del equipo prácticamente, dirigiendo y creando una buena sociedad con el caboverdiano, que se transformó en el máximo anotador del partido. En todo caso, el Bayern fue capaz de supervisar la batalla con un juego exterior-interior buenísimo, probando la calidad de los bloqueos en todas y cada una de las posesiones, acabando en muchos triples con acierto, si bien durante la época su porcentaje de acierto no era tan alto como esta noche. De todas y cada una maneras, Cornelie asimismo aportó su presencia desde el tiro de 3, si bien falló más de lo que anotó, mas la variación táctica era positiva para procurar desplazar la defensa alemana, mas sin éxito por el momento.

El segundo ataque empezó prácticamente igual que el primero. Hezonja probó su talento incomensurable tras una bandeja altísima que anotó tras rebotar en tabla. El Bayern, por su parte, destruyó la defensa madridista con buenísimos indirectos que aprovechó tanto Hunter como el resto de los exteriores, sobre todo Bonga, que con su gran extensión y físico, se hacía muy complicado de parar. Por otra parte, el ataque blanco se fundamentaba en Llull y Causeur, obviando la figura del croata, y obviamente, no funcionó. En todo caso, Yabusele apareció con un enorme tiro en suspensión cara atrás desde el poste, que entró limpia, si bien verdaderamente la figura del partido para los visitantes fue Tavares. 'SuperMario' anotó un triple clave para acortar el marcador, que por el momento era conveniente a los locales, mas los de Chus Mateo precisaban algo más en defensa, ya que los alemanes no tenían un buen perímetro, mas rompieron el encuentro por esa parte. Las últimas posesiones fueron muy dispares, ya que el R. Madrid no lograba un ataque limpio, solo sumando unidades desde el triple forzando las elijas de tiro, al paso que el Bayern falló múltiples suspensiones absolutamente liberados. Los 'SplashBrates' por fin conectaban, y en una jugada muy bonita: tras un rebote capturado por Hezonja, efectuó un pase de cancha a cancha a fin de que Musa, totalmente a placer, la empuje cara abajo.

Tras paso por vestuarios, el R. Madrid se confió al dominio zonal de Tavares, que respondió con un tapón solamente iniciar el cuarto, aparte de, en posesión ofensiva, sacarle una falta esencial a Hunter. Goss prosiguió incidiendo en agredir la zona con múltiples penetraciones, si bien sin éxito alguno, al tiempo que el caboverdiano proseguía anotando desde el tiro libre, frente a la imposibilidad de pararle con el reloj corriendo. Por otra parte, los blancos proseguían fallando desde el 4'75, ya fuera con el pívot o con Musa, que se unió a la celebración. Othello estaba efectuando un partido completísimo desde el triple, al tiempo que los blancos no lograban abrir ni la zona ni tampoco la parte externa de la cancha, hasta el momento en que Cornelie fue al poste para exhibir sus 2,11 y unos brazos eternos para sumar dos unidades más. Nuevamente, en este final de periodo, Hezonja salió a cancha para solo 3 minutos, y esa infrautilización de uno de los jugadores con más calidad de la plantilla no se comprendía, pues aportaba más que triple y defensa, mas Chus Mateo no lograba verlo. En todo caso, los franceses del R. Madrid se juntaron en cancha, si bien en lo que se refiere a juego, tampoco fueron los más definitivos en lo que se refiere a producción ofensiva, al tiempo que Cory Walden encestó su tercer triple de 4 intentos, y el Chacho ya sumaba dos fallos sucesivos.

Los últimos diez minutos empezaron con Hezonja asumiendo más responsabilidad, si bien erró el primer tiro, muy lejano. A pesar de ello, el Bayern era un contendiente genial, con un Walden y un Jaramaz muy activos y explosivos. Llull sería quien devolvería el beneficio en el marcador por un triple, gracias asimismo a un rebote capturado por Tavares y a una asistencia veloz de Hezonja, que le halló liberado. La rotación blanca era muy pobre, sin que ni Musa ni el croata coincidiesen en cancha, ni tampoco estuviesen jugando a 5 minutos del final, si bien los dos equipos fallaron múltiples triples seguidos en 4 posesiones. Los de Chus no conseguían abrir la cancha para anotar triples, y es que los que lanzaban, los erraban, si bien Yabusele, que insistió mucho en cargar la zona, consiguió anotar con un gancho muy complicado. Sería el tirotear quien fue de nuevo determinante en el clutch para el R. Madrid con un tiro exterior esencial para prácticamente cerrar el encuentro, al tiempo que Abalde era la llave en defensa. En este último minuto, una resolución arbitral sin ningún sentido pitando una falta antideportiva del gallego puso al Bayern a 3 puntos y con posesión por delante, si bien no podían agotar el reloj, y ya antes del saque de banda, Musa pisó la línea e invadió al sacador, señalando una técnica al bosnioherzegovino que Obst transformó. Tras el fallo en el tiro, el '31' blanco anotó los dos tiros libres que los árbitros concedieron tras la falta local, y este final de encuentro acabó siendo madridista tras padecer innecesariamente.